Este es un sencillo comedero para las aves de corral y además tiene un coste bastante reducido.
Este tipo de comederos, al tener la forma curvada del tubo el grano siempre queda más recogido y se aprovecha mejor.
Este es un tubo metálico al que se le han añadido dos bases de madera para que permanezca estable y no se vuelque. El tubo se a unido a las maderas mediante escuadras y tornillos.
La longitud del comedero puede variar conforme se desee, pero es aconsejable un tamaño que se pued transportar cómodamente según las necesidades de cada uno.
También se puede optar por tubo de PVC que sale más económico.
Al no ser tan rígido como el tubo de metal se le han practicado a la madera unas hendiduras para encajar el perfil del tubo, quedando sujeto e impidiendo que se vaya plegando hacia dentro con el paso del tiempo.
Las maderas que sirven de patas se han unido entre ellas con una varilla pasante. Esta varilla, además de unir la estructura del comedero, sirve para impedir que las gallinas más traviesas metan sus patas dentro del comedero y revuelvan toda la comida por el suelo.
Por último, no olvidar retirar los extremos de las varillas que sobresalen por los lados del comedero para que las gallinas no se lastimen.
Este es otro modelo de comedero basado en los anteriores, pero con un sistema de estabilización diferente ya que se le ha preparado una base de madera para albergar el canalón.
Los extremos han sido tapados con circunferencias de madera hechas a medida.
Fuente: infojardin.com
Este tipo de comederos, al tener la forma curvada del tubo el grano siempre queda más recogido y se aprovecha mejor.
Este es un tubo metálico al que se le han añadido dos bases de madera para que permanezca estable y no se vuelque. El tubo se a unido a las maderas mediante escuadras y tornillos.
La longitud del comedero puede variar conforme se desee, pero es aconsejable un tamaño que se pued transportar cómodamente según las necesidades de cada uno.
También se puede optar por tubo de PVC que sale más económico.
Al no ser tan rígido como el tubo de metal se le han practicado a la madera unas hendiduras para encajar el perfil del tubo, quedando sujeto e impidiendo que se vaya plegando hacia dentro con el paso del tiempo.
Las maderas que sirven de patas se han unido entre ellas con una varilla pasante. Esta varilla, además de unir la estructura del comedero, sirve para impedir que las gallinas más traviesas metan sus patas dentro del comedero y revuelvan toda la comida por el suelo.
Por último, no olvidar retirar los extremos de las varillas que sobresalen por los lados del comedero para que las gallinas no se lastimen.
Este es otro modelo de comedero basado en los anteriores, pero con un sistema de estabilización diferente ya que se le ha preparado una base de madera para albergar el canalón.
Los extremos han sido tapados con circunferencias de madera hechas a medida.
Fuente: infojardin.com
Realmente quedó increible el comedero para gallinas. Sin duda un gran trabajo, felicitaciones por ello
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