Para los días calurosos nada mejor que unas imágenes bien fresquitas.
El retratista norte americano Steeve Iuncker refleja a la perfección en estas imágenes el frío imponente que hace en la ciudad de Yakutsk.
La ciudad de Yakutsk está situada en el interior de Siberia a lo largo del río Lena, a unos 5000 km de Moscú y cuenta con más de 250.000 habitantes, una cifra nada despreciable. Las escuelas solo cierran cuando la temperatura alcanza los 50º bajo cero, hace algunos años llegaron a padecer temperaturas de 63º bajo cero. Es una región rica en oro y diamantes, tal vez sea esta la explicación de que tanta gente viva en la ciudad, buen trabajo y buen salario.
Si quieres dar un paseo por la ciudad prepárate un par de calcetines de algodón sobre otro par de calcetines termales, unas botas de Gore-Tex que cubra por encima del tobillo, unos pantalones vaqueros, camiseta interior termal,encima de esta una camiseta de manga larga, por supuesto, luego un jersey de cashmere, a continuación un abrigo invernal con capucha y un par de guantes de lana para ponerse debajo de unas manoplas térmicas. Esto es lo necesario para deambular por la calle debido al rigor del frío.
En esta ciudad un día de -5º puede convertirse en día de lo más agradable y placentero, el cual debe ser aprovechado al máximo, eso sí, con abrigo y bufanda. A -20º se congela el interior de la nariz y se hace complicado respirar adecuadamente. A -35º el aire gélido dormirá cualquier pedazo de piel del cuerpo que quede al descubierto por una insensatez, los sabañones empezarán a hacer acto de presencia. A -45º llevar gafas es treméndamente difícil, las patillas de las gafas pueden quedar adheridas a la piel y ser arrancada ene el momento de quitarlas.
Vivir en esta ciudad es todo un reto, aunque la gente va aplicando hábitos y costumbres que hacen la vida más llevadera.
El retratista norte americano Steeve Iuncker refleja a la perfección en estas imágenes el frío imponente que hace en la ciudad de Yakutsk.
La ciudad de Yakutsk está situada en el interior de Siberia a lo largo del río Lena, a unos 5000 km de Moscú y cuenta con más de 250.000 habitantes, una cifra nada despreciable. Las escuelas solo cierran cuando la temperatura alcanza los 50º bajo cero, hace algunos años llegaron a padecer temperaturas de 63º bajo cero. Es una región rica en oro y diamantes, tal vez sea esta la explicación de que tanta gente viva en la ciudad, buen trabajo y buen salario.
Si quieres dar un paseo por la ciudad prepárate un par de calcetines de algodón sobre otro par de calcetines termales, unas botas de Gore-Tex que cubra por encima del tobillo, unos pantalones vaqueros, camiseta interior termal,encima de esta una camiseta de manga larga, por supuesto, luego un jersey de cashmere, a continuación un abrigo invernal con capucha y un par de guantes de lana para ponerse debajo de unas manoplas térmicas. Esto es lo necesario para deambular por la calle debido al rigor del frío.
En esta ciudad un día de -5º puede convertirse en día de lo más agradable y placentero, el cual debe ser aprovechado al máximo, eso sí, con abrigo y bufanda. A -20º se congela el interior de la nariz y se hace complicado respirar adecuadamente. A -35º el aire gélido dormirá cualquier pedazo de piel del cuerpo que quede al descubierto por una insensatez, los sabañones empezarán a hacer acto de presencia. A -45º llevar gafas es treméndamente difícil, las patillas de las gafas pueden quedar adheridas a la piel y ser arrancada ene el momento de quitarlas.
Vivir en esta ciudad es todo un reto, aunque la gente va aplicando hábitos y costumbres que hacen la vida más llevadera.
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