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sábado, 12 de marzo de 2016

El perro salchicha.

Imagen wikifaunia.com
El dachshund ("perro tejón", en español), también llamado teckel, dackel o perro salchicha, es una raza canina. Su peculiar fisonomía se debe a una mutación genética conocida como bassetismo, que dota a los ejemplares de unas extremidades cortas en relación con el tamaño del cuerpo.
El primer club de la raza se fundó en Alemania en 1888, cuando se redactó el primer estándar, aunque ejemplares de esta raza ya se habían presentado años antes en exposiciones caninas en Inglaterra.
La popularidad de los teckel se ha debido en gran medida a ser una de las razas preferidas por las monarquías europeas, incluida la de la reina Victoria, que era particularmente entusiasta de esta raza.

La FCI decidió crear el Grupo IV sólo para esta raza, ya que a pesar de ser un perro de madriguera, su carácter y constitución distan mucho de los basset hound.
Cada año, cientos de salchichas se reúnen en varias ciudades del mundo para celebrar festivales dedicados a esta peculiar e inconfundible raza.
Su forma es alargada y baja, con una cola larga y hocico estirado, orejas largas y caídas, patas cortas y uñas negras. Estas patas cortas son quizás la característica más reconocida de la raza y las que facilitan la caza en madrigueras, que era su principal actividad dentro de la caza, donde se muestra como un rastreador y muy valiente, y que no dudará en enfrentarse a un fiero jabalí.
Grabado de una pareja de Dachshund.

Hay tres variedades, según la circunferencia torácica medida a la edad de 15 meses:
Estándar: peso máximo de 9 kg y una circunferencia torácica superior a 35 cm.
Miniatura: circunferencia torácica entre 30 y 35 cm.
Teckel para la caza del conejo: circunferencia menor de 30 cm.
Cada una de las variedades de tamaño puede presentar tres tipos de pelo:
De pelo corto.- El pelo debe ser corto, espeso, brillante, liso, bien pegado al cuerpo, fuerte y duro; no debe mostrar zonas sin pelo. La cola con pelo fino y tupido.

De pelo largo.- El pelaje está provisto de una capa externa de pelo liso, brillante y bien pegado al cuerpo, se alarga debajo del cuello y en la parte inferior del cuerpo, sobresale en las orejas y presenta en la parte posterior de las extremidades un pelo claramente más largo en forma de plumas. El pelo más largo se encuentra en la parte inferior de la cola, donde forma bandera.
De pelo duro.- Con excepción del hocico, las cejas y las orejas, tiene en todo el cuerpo - mezclado con la capa interna de pelo - una capa externa con el pelo pegado al cuerpo, espeso, áspero y grueso. En el hocico posee una barba bien marcada. Las cejas son tupidas. En las orejas, el pelo es más corto que en el cuerpo, casi liso. La cola con pelo bien desarrollado, uniforme y muy pegado.

Perros unicolores: Rojo, rojo-amarillo, amarillo, con o sin moteado negro. El blanco no es deseable, pero en forma de unas pequeñas manchitas no es eliminatorio. La trufa (parte terminal de la nariz) y uñas son negras, aunque se permite el color rojizo-marrón.
Perros bicolores: Negro profundo o marrón claro, todos con marcas de fuego de color rojo oxidado o amarillo encima de los ojos, a los lados del hocico y del labio inferior, en el borde interior de las orejas, en el antepecho, en las partes interiores y posteriores de las extremidades, en los pies, alrededor del ano y desde aquí hasta un tercio o la mitad de la parte inferior de la cola. La trufa y las uñas son negras en perros negros; en perros de color marrón, llevan este mismo color. El blanco no es deseable, pero se admiten pequeñas manchas. No son deseables marcas de fuego demasiado extendidas.

Perros manchados (arlequines, atigrados): El color básico es siempre un color oscuro (negro, rojo o gris). Son deseables manchas irregulares grises o beige. Ni el color oscuro ni el claro deben predominar. El color atigrado tiene rayas más oscuras sobre un fondo rojo o amarillo. La trufa y uñas son como en el caso de los perros uni o bicolores.
Imagen: alcacucha.com

Se exagera mucho, demasiado, al afirmar que el teckel es testarudo y no se deja educar. Sin embargo, puede existir alguna razón para juzgarlo así, tal vez su pequeño tamaño lleva a cuidarlo más de lo debido y a transigir con sus caprichos, los mismos que tienen la mayoría de cachorros, lo que luego en el lenguaje popular se traduce en las proverbiales "cabezonerías" del teckel, que se dan en casi todos los cachorros. Aparte de ello, la educación de un teckel no es más difícil que la de cualquier perro. Al contrario. El teckel es un perro muy inteligente, que aprende muy rápido, y de cachorro, igual de cabezón que otras razas. Todos los perros tienden a dominar, a ser el líder de la manada, y cuanto más inteligentes son más lo intentan. Una vez que comprenden quién es el líder de la manada son perros dóciles, cariñosos, protectores, sumisos en su justa medida, a la par que muy juguetones.

El teckel, de buenas líneas de trabajo, no es un sabueso en el estricto sentido del término, pero como le viene de este su excelente olfato, puede hacer el trabajo de un sabueso a su manera y de acuerdo con su pequeño tamaño. No es un terrier propiamente dicho, pero trabaja a la perfección bajo tierra en la madriguera, como lo haría un terrier, tampoco es un braco propiamente dicho, pero puede hacer el trabajo de éste, de acuerdo con su tamaño.

No hay que igualar un perro de caza a otro, todos tienen sus ventajas y sus inconvenientes, sus especialidades según su tamaño, pelo, etc. El teckel reúne cualidades de casi todos los perros de caza y en manos de un buen cazador que lo sepa adiestrar bien y que disponga de un terreno de caza de pelo y pluma y quizás alguna madriguera, zarzas, jaras, matojos, un charco cerca y algún paso de jabalíes, tendrá en el teckel un pequeño perro de caza que le levantara cualquier pieza, pondrá algún zorro a tiro, dentro o fuera de la madriguera, rastreará el rastro de sangre de: jabalí, corzo, ciervo, u otra pieza de caza mayor durante kilómetros y kilómetros, por lo que conviene que, en este caso, vayan atados en largo, pues debido a su tozudez, el perro seguirá el rastro constantemente, con riesgo de perderse, aunque siempre vuelva al sitio de partida, volviendo sobre sus rastros, pero pueden pasar muchas horas o incluso días, cuando el amo ya no esté allí.

Conviene adiestrar al teckel para caza mayor o menor (solo una de ellas), puesto que si vamos de caza menor y detecta un rastro de jabalíes, venados, corzos, ciervos, seguirá el rastro hasta que le perdamos de vista, despreocupándose de las piezas menores. Y viceversa; en caza mayor, no dudará en seguir el rastro de liebres, conejos y perdices hasta localizarlas. Dado que es un perro apto para ambas cazas y que el instinto le va a llevar a seguir cualquier rastro de ambas, se debe educar para que se especialice única y exclusivamente al tipo de caza que nos vamos a dedicar.
La raza es conocida por sus problemas de espina dorsal, debido a su columna vertebral extremadamente larga y a sus costillas cortas. El riesgo de lesiones puede empeorar en caso de sobrepeso. Para prevenir daños, es recomendable que estos perros no salten ni suban y bajen escaleras. Cada vez es más evidente que estos problemas son hereditarios, y los criadores trabajan en la mejora de la raza.

Sin embargo, es sabido que estos perros, con una correcta educación deportiva, no presentarían problemas en este ámbito. En especial si son animales que gozan de grandes espacios donde pueden correr y saltar libremente. Son perros muy ágiles de reflejos excepcionales que, sin embargo, por sus patas cortas no alcanzan altas velocidades. En general son canes que no son propensos a enfermedades siempre y cuando el dueño tenga un buen cuidado al momento de una enfermedad, tanto como, llevarlo al veterinario, como siguiendo sus instrucciones.
Por otro lado, la alimentación del teckel o perro salchicha es de suma importancia. Si se le proporciona demasiada comida, el can engordará y tendrá dificultades para su movilidad, y como consecuencia presentaría dolores de espalda y con los años graves problemas de espina dorsal y hernias discales.

Aunque esta raza consume carne como cualquiera otra canina no quiere decir esto que sólo debe alimentarse de esta. Es muy recomendable alimentar los dachshund con alimentos balanceados ricos en proteínas y vitaminas, las cuales lo ayudan a crecer de una manera saludable.
Esta raza también se distingue por ser excelentes perros caseros, especialmente apropiados para vivir en residencias de reducido tamaño debido a su pequeña estatura y buen temperamento.




El perro y el yoga.

A los perros les encanta el ejercicio físico, pero sobre todo les encanta practicar yoga para relajarse después de un agotador día de acá para allá con el dueño, corriendo y saltando en el parque. Hay que calmar cuerpo y mente...







...y después un buen baño de espuma...



jueves, 10 de marzo de 2016

Cine, crisis, drama y comedia.

La gran apuesta (The big short)

Película que trata de explicar los motivos de la crisis económica. Para ello cuenta con el camaleónico Christian Bale un profesor al "margen" del sistema que, al descubrir que la economía podía colapsar, decide tomar decisiones.
La película intenta explicar los entramados por los que discurre el mercado inmobiliario y las grandes inversiones. La verdad es que a veces resulta difícil seguir lo que podríamos llamar "la letra pequeña" pero a grandes rasgos resulta bastante clarificadora y por lo tanto irritante para el ciudadano medio.

Lo mejor: El sentido del humor y la ironía hacen llevadera la cruel realidad.
Lo peor: La impotencia puede hacer mella en nuestro estado de ánimo.


The big short (La gran apuesta)

País y año de lanzamiento: Estados Unidos. 2015
Director: Adam McKay
Protagonistas: Christian Bale, Steve Carrel, Ryan Gosling, John Magaro, Brad Pitt
Género: Drama, crisis financiera, comedia dramática.

Tráiler de la película:



Carátulas del film:



Cartel:

martes, 8 de marzo de 2016

Tuiteando humor en 140 caracteres o menos.

En las redes sociales te puedes encontrar humor a raudales, humor gráfico, en vídeo o escrito como los ingenioso tuits recopilados a continuación...






Lugares del mundo; Islas Maldivas.

Las Maldivas es un país insular situado en el océano Índico. Su territorio está organizado en 26 atolones. La capital y, a la vez, la ciudad más poblada es Malé, con una población de 104 403 habitantes.
El país está constituido por unas 1200 islas, de las cuales 203 están habitadas. El territorio se encuentra en pleno océano, al sudoeste de Sri Lanka y a 450 km de la India.

Posee un clima tropical y húmedo con una precipitación aproximada de 2000 mm al año.
Es uno de los menores países asiáticos tanto en términos de población como de extensión.
Las Maldivas ostentan el récord de ser el país más plano del mundo, con una altitud máxima de sólo 1,8 metros en la isla Vilingili, en el atolón Addu.

El archipiélago está compuesto por cerca de 1190 islas coralinas agrupadas en una doble cadena de 26 atolones, siguiendo una dirección norte-sur, que ocupan una extensión de cerca de 90 000 km².  


Todo bien ordenado.

El orden es la colocación de las cosas en su lugar correspondiente, es la buena disposición de las cosas entre sí. 
Lo que ocurre, es que cuando el orden se realiza a conciencia y con cierta inspiración, se puede convertir en arte. Hasta un camión de troncos puede estar cargado con mucho arte si se hace con una sucesión y relación de un elemento respecto a otro.





Visto en: nomedarisa.tumblr

domingo, 6 de marzo de 2016

La abuela y el nieto.

Rosa vivía en un cuarto con una pequeña ventana que abría cada día a las 10 am. El balcón de su  departamento estaba lleno de maceteros con flores, sin embargo, últimamente se estaban secando y muriendo. Esa era una de las señales que alertaba a Miguel, Juan y Armando sobre la inestabilidad de su madre. A los 86 años, si no podía cuidar de unas flores, menos podría cuidarse a sí misma, pensaban ellos. Los hijos hablaban constantemente sobre qué hacer con ella. Ninguno la quería acoger, pero sabían que tenían que hacer algo pronto. Lucas, el hijo de Juan, siempre intentaba convencer a su padre de recibirla. Nunca obtuvo una respuesta clara, excepto cuando se le dio la tarea más importante.

A Lucas se le ordenó llevarla a un asilo ubicado en el centro de la ciudad. Él ya tenía 18 años y podía manejar el coche o pedirse un taxi para hacer el traslado. Además, los hermanos pensaron que como su madre adoraba al joven, estaría todo bien. Ellos dieron la misma excusa para no ir: trabajo. Pero cuando Lucas le preguntó a su padre por qué no lo hacían un fin de semana, éste le respondió que había que hacerlo lo antes posible. Nada más que eso. Ningún comentario sobre su estado de salud ni sobre lo que ella pensaba de la mudanza.

El joven estaba de vacaciones, así que fue en bus a la casa de su abuela. Ella lo recibió con un sándwich y un vaso de bebida. Se quedaron en la terraza y el niño vio que las flores que antes estaban secándose, habían vuelto a ponerse verdes y frescas. Les pasó la mano por los pétalos, entonces Rosa le dijo: “Las he regado ahora que me dijeron que me cambiarían de lugar. Pensé que les costaría acostumbrarse a una habitación cerrada, así que les he dado mucho para beber”. Lo dijo con tono triste y Lucas bajó la mirada. Terminó su sándwich y luego comenzó a bajar las cosas mientras su abuela se preocupaba de mantenerle abierta la puerta del ascensor para que no le estorbara.

En el taxi estuvieron callados. Rosa miraba por la ventana y Lucas alternaba su vista. Las calles, el taxímetro, su abuela: ese era el recorrido que hacían sus ojos. A medida que avanzaban, las calles se iban poniendo ruidosas y los edificios crecían en altitud. El joven pensó que a su abuela no le gustaría mucho su nueva casa. Quiso preguntárselo, pero luego entendió que eso podría herirla. No había nada qué hacer, ella haría lo que sus hijos decidieran. Una vez que llegaron al destino, Lucas se bajó rápido y llevó a su abuela adentro. Llegaron a la pieza que tenía su nombre en la puerta. Ambos se miraron y Rosa entró primero.

Ella fue hacia una ventana que había, la trató de abrir pero los engranajes estaban oxidados y Lucas tuvo que ir a ayudarla. Pusieron los adornos que llevaban y ubicaron la ropa en el clóset. La mujer dejó sus plantas a los pies de la cama. Pegó una cruz en el respaldo y se quedó largo tiempo sentada sin hablar mientras su nieto terminaba de ordenar las maletas. Cuando hubo terminado y éste se acercó para despedirse, lo besó en la mejilla y le dijo: “Ven a visitarme, eres lo único que me queda. No quiero perderte”. Lucas la miró, triste, sabía a lo que se refería. Le había quedado claro por cómo su padre le dio la orden y por la actitud de sus tíos.

Llegó a su casa de noche. A su abuela le dejó una pulsera que había comprado hace pocos meses en la playa. Tenía un diente de tiburón atado a ella y eso la sorprendió. Le dijo que era un regalo para que se acordara de él, que trataría de visitarla lo más posible y que le conseguiría un teléfono para que pudieran hablar seguido. Estaba decidido a ser su compañía constante, cumpliría su promesa para que no se sintiera sola. Tampoco le diría nada a su padre ni a sus tíos. Pensó que ellos irían entendiendo de a poco, a medida que se dieran cuenta de su ausencia. Y si no, así tendría que ser.

Lucas se percató de que había aprendido mucho en un sólo día. Dos cosas importantes en las que ponía su máximo esfuerzo por grabarse en la mente. La primera era que amaba de todo corazón a su abuela. La segunda, que lo que más deseaba en el mundo era no parecerse a su padre.


Creer en fantasmas.

Todos hemos oído hablar de espíritus o entes fantasmales que vagan por las estancias de casa encantadas o malditas, sin embargo cuando un "espectro" se presenta ante nosotros envuelto en una sábana blanca resulta difícil de creer...